El 3 y 4 de agosto de 2010 tuvo lugar en Roma el encuentro internacional de monaguillos.
Permitirme un comentario muy personal: al ver los videos que más abajo podrán observar también ustedes, no pude evitar agradecer a Dios nuestro Señor el don de cada uno de esos niños y niñas que con generosidad sirven durante la misa, es decir, en el momento más importante de la vida cristiana. Desde luego también pensé en la situación de la Iglesia en los últimos años, sobre todo a raíz de los escándalos por parte algunos miembros del clero. Y agradecí al Señor la confianza de los padres de familia que tienen presente que por el hecho de que algunos hayan fallado, no todos los sacerdotes son iguales y, de hecho, la inmensa mayoría de ellos son hombres de Dios, entregados a su labor pastoral, en comunión con el Papa.
La clausura de este encuentro mundial de monaguillos coincidió con el día de san Juan María Vianney, el cura de Ars. La consideración de esta "diocidencia" me hizo pensar también en que seguramente muchos de esos niños sentirán y acogerán en un futuro el llamado de Dios para consagrarle su vida como sacerdotes o monjitas. Recemos por ellos y por todos los que, durante este periodo de verano en el hemisferio norte, están haciendo una experiencia de discernimiento en seminarios, monasterios y conventos.
El video que más me gusto fue éste:
La clausura de este encuentro mundial de monaguillos coincidió con el día de san Juan María Vianney, el cura de Ars. La consideración de esta "diocidencia" me hizo pensar también en que seguramente muchos de esos niños sentirán y acogerán en un futuro el llamado de Dios para consagrarle su vida como sacerdotes o monjitas. Recemos por ellos y por todos los que, durante este periodo de verano en el hemisferio norte, están haciendo una experiencia de discernimiento en seminarios, monasterios y conventos.
El video que más me gusto fue éste:
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