viernes, 15 de octubre de 2010
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ResponderEliminarJorge Enrique:
ResponderEliminarMe llamo Carlos Jiménez, soy miembro supernumerario de la Prelatura del Opus Dei. Soy estudiante de filosofía y va conmigo un compañero que estuvo un año en el noviciado con ustedes. Como sea le compartí una entrada de mi blog que escribí ayer y me dio el link de tu blog. Te lo quiero compartir porque me gustaría saber qué opinión te merece lo que escribí y si te sirve de apoyo par difundir más las inquietudes de un católico que no forma parte de la institución a la que perteneces, pero que hayan sido ustedes o quien sea, que esté en el ojo del huracán, estaré haciendo ruido y conciencia entre los propios católicos, pues me parece que debemos de formarnos más y mejor.
http://carlosjimnez.blogspot.com/2010/10/lena-del-arbol-caido.html
Saludos.
Carlos
Fuí Legionario de Cristo 9 años. Me parece excelente idea abrir las puertas entre la Legión y el mundo seglar para que conozcamos de primera mano, la situación de los legionarios, sus sentimientos y las razones que los mueven en este momento tan complicado. Sin embargo, creo que los legionarios tienen más preguntas para nosotros que nosotros para ellos, y eso me admira, que son callados y entragados a ayudarnos en nuestras dudas. Mi pregunta es ¿cómo podemos ayudarlos? Me permito autorresponder: cuenten con mis oraciones y mi apoyo para defenderlos como hombres de Dios.
ResponderEliminarCarlos, agradezco mucho su valioso comentario. Cuánta gratitud a todos los miembros de la obra. Han sido muy cercanos y compartimos con ellos, como con todo católico auténtico, el amor a la Iglesia a la que queremos seguir sirviendo y defendiendo. Leí tu artículo y te lo agradezco. Es tu opinión y sentir y sobre eso tú mejor que nadie conoce las motivaciones de fondo. Yo estoy orgulloso de ser católico e inmensamente agradecido de ser legionario.
ResponderEliminarArthur: gracias de verdad por tu mensaje-reflexión-motivación.